Cómo cuidar tu corazón con la alimentación

cuidar el corazon mediante la alimentacion

El 29 de septiembre se celebra el Día Mundial del Corazón, una fecha que nos recuerda la importancia de cuidar este órgano vital. Uno de los factores más influyentes en la salud cardiovascular es la alimentación: lo que ponemos en nuestro plato cada día puede marcar la diferencia entre un corazón fuerte y uno que sufra más de la cuenta.

A continuación, te contamos tres hábitos alimentarios que te ayudarán a favorecer tu salud cardiovascular y a sentirte mejor.

1. Reduce las grasas saturadas

Las grasas saturadas se encuentran principalmente en carnes grasas, embutidos, quesos curados y lácteos enteros, así como en aceites como el de coco o palma, presentes sobre todo en productos de bollería industrial como galletas y diferentes snacks.

El exceso de este tipo de grasas puede aumentar el riesgo de enfermedad cardiovascular. Pero la buena noticia es que reducirlas es posible con pequeños cambios:

  • Sustituye la bollería por pan o cereales integrales, o mejor aún, por fruta fresca.
  • Da preferencia al pescado frente a la carne y, cuando la consumas, elige cortes magros como pollo, pavo o conejo, retirando la grasa visible.
  • Evita los embutidos y quesos muy grasos y opta por lácteos desnatados.

Para ayudarte a tomar más pescado en tu día a día, puedes recurrir a los platos de pescado Carretilla, una opción práctica y sabrosa que te lo pone fácil para cuidar de tu corazón. Puedes disfrutar de recetas como Albóndigas de Merluza con Almejas y el Marmitako, listas para comer.

2. Da más protagonismo a las grasas saludables

No todas las grasas son iguales. Las monoinsaturadas (presentes en aceite de oliva, aguacate o frutos secos) y las poliinsaturadas, entre ellas los famosos omega-3 del pescado azul, son grandes aliadas del corazón.

¿Cómo incorporarlas en tu dieta?

  • Cocina y aliña con aceite de oliva.
  • Añade un puñado de frutos secos o semillas cada día a tu dieta.
  • Incluye pescado azul (salmón, sardinas, atún, boquerones…) al menos dos veces por semana.

3. Apuesta por la fibra y los antioxidantes

Frutas, verduras, legumbres y cereales integrales como la avena o la cebada aportan fibra, fundamental para regular el colesterol y proteger la salud cardiovascular.

Además, estos alimentos son ricos en antioxidantes (carotenoides, polifenoles, vitaminas C y E), que ayudan a proteger nuestras células del daño oxidativo.

Algunos consejos prácticos:

  • Procura tomar al menos 5 raciones de frutas y verduras cada día, combinando opciones crudas y cocinadas.
  • Adereza tus platos con aceite de oliva y frutos secos.

  • Incluye legumbres varias veces por semana, fáciles de disfrutar en ensaladas, guisos y diferentes opciones de platos preparados.

Y si buscas ideas fáciles para aumentar el consumo de fibra y antioxidantes, en Carretilla encontrarás opciones listas para disfrutar: desde conservas vegetales como espárragos, gazpacho, cremas y otros platos preparados de verdura que te ayudan a cuidar tu corazón sin renunciar al sabor.

En resumen, ayudar al bienestar de tu corazón no requiere cambios radicales, sino decisiones diarias más conscientes: reducir las grasas poco saludables, apostar por las grasas buenas, y llenar tu mesa de fibra y antioxidantes. ¡Y recuerda! Incorporar verduras, legumbres y platos equilibrados a tu día a día es una forma práctica de sumar salud y cuidar de tu corazón.