Las almejas son un molusco bivalvo que viven enterradas en la arena de ríos y mares. Es un alimento muy apreciado por su delicado sabor, que suele consumirse como ingrediente en recetas tradicionales como paellas o guisos, o bien como entrante o tapa aliñado con alguna salsa ligera.
Más allá de sus cualidades gastronómicas, las almejas tienen un valor nutricional muy interesante e incluirlas a menudo en nuestra alimentación, la enriquece en nutrientes.
Beneficios nutricionales de las almejas
Las almejas son ricas en proteínas de buena calidad y muy bajas en grasa. Gracias a estas cualidades nutricionales, las almejas resultan ideales en dietas de control del peso o en dietas en las que hay que controlar el contenido de grasas.
Si echamos un vistazo a sus micronutrientes, las almejas destacan por su contenido en hierro y yodo. De hecho, es un alimento ideal para enriquecer en hierro la dieta de personas con anemia ferropénica ya que, no solo es uno de los alimentos más ricos en hierro, si no que, además, tienen un perfil nutricional más saludable que otras fuentes. El hierro ayuda a transportar oxígeno a través de la sangre y participa en la función inmune de nuestro organismo. Por otro lado, el yodo participa en la función cognitiva y el sistema nervioso, y también en el correcto funcionamiento de las tiroides.
Las almejas también nos aportan otras vitaminas y minerales implicados en el sistema inmune como la niacina, o la vitamina B3, y el selenio.
Como ves, las almejas resultan ser un alimento muy nutritivo, que a menudo tenemos olvidado. Para que a partir de ahora puedas añadirlo más frecuentemente en tus menús, te contamos algunas ideas.
Cómo incluir las almejas en tu alimentación
Como hemos visto, nutricionalmente hablando, las almejas se parecen al pescado blanco y su frecuencia de consumo semanal sería equivalente. Es decir, la recomendación de consumo de pescado blanco es de 3 veces por semana. Pues bien, puedes sustituir una de estas 3 por almejas y estarás obteniendo los mismos nutrientes. Es un buen modo de variar tu alimentación, manteniendo la calidad nutricional.
Las almejas son fáciles de preparar, con un toque de vapor, con algo de limón, perejil, un poquito de ajo y un chorrito de vino blanco, quedan perfectas. Pero lo cierto es que es un alimento que requiere consumirse el mismo día que las compramos, y no siempre tenemos tiempo de pasar por el mercado. Quizás por esta razón, aunque nos encanten, las tomamos muy de vez en cuando. Por suerte, existen opciones para comerlas tanto si no tienes tiempo, como si no eres muy cocinillas.
Una buena forma de introducir esta delicia con sabor a mar es como plato principal con la clásica receta de Almejas a la Marinera que te ofrece Carretilla, poniéndotelo muy fácil y trayéndolas listas para disfrutar. Además, este Plato Listo de Carretilla ha sido galardonado con dos premios Innoval en Alimentaria, en las categorías “Alimentación seca, deshidratada, conservas y semiconservas” y en “Tendencias de Conveniencia”
Otra forma de reversionar las Almejas a la Marinera es combinarlas con un poco de arroz blanco. Una vez tengas el arroz cocido y las almejas calientes, mézclalo para que la salsita quede bien integrada al arroz ¡y listo! Y si quieres sorprender a quienes has invitado, utiliza unos espaguetis negros, los elaborados con tinta de calamar, y los combinas con las almejas. Puedes darle el último toque añadiendo un poquito de salsa de tomate. Apetecen, ¿verdad?
Además, otra buena forma de incluir las almejas en nuestra alimentación, en como acompañamiento e ingrediente en otras recetas, como es el caso de las Albóndigas de Merluza con Almejas de Carretilla. Un guiso suave y aromático que gustará a toda la familia y tendrás listas en un periquete. También, al igual que las Almejas a la Marinera, han sido premiadas con dos premios Innoval en la feria Alimentaria.
¡Ahora ya no tienes excusa para disfrutar más a menudo de esta delicia de nuestra gastronomía!